Protagonistas: Gabriela, Fabio, Betina, Adrián, Mónica, Sabrina, Patricia, Aquiles.
Varietero Invitado: Marina
Actividad: Fotos sensoriales
Lugar de encuentro: Hacia la reserva ecológica
Hora: 16hs
Día: 9 de mayo de 2009
Tiempo: Soleado
Estado: Encuentro alegre
Próxima función: Anudando artesanías en macramé
Fragmentos de "Jugando con los sentidos"
Poco a poco llegaron los participantes, saludos, miradas, palabras e imágenes fueron acercándonos, ya agrupados se emprende la caminata con destino a la reserva ecológica.
Luego de quince minutos de peregrinación algunos de los participantes piden hacer una parada para sentarnos en una plaza que se encuentra a un costado de la reserva. Nos disponemos en ronda, posición que nos permitía vernos a la cara y descubrirnos.
Un mate emprende su ruta, de mano en mano transita la ronda llevando deseos, ansiedades y preguntas. La trayectoria nos fue acercando y permitiendo saber del otro. Surgen diferentes temas y la charla nos invita a viajar por heterogéneos escenarios, cada uno cuenta sus experiencias.
Una vez más livianos, nos paramos para dar inicio a la actividad. La consigna es caminar, recorrer el espacio sin una dirección establecida. Lentamente los pies aceleran su andar, nos animamos, nos acercamos, nos miramos, el recorrido se torna circular.
Se propone jugar a decir el nombre de quien tengo a la derecha cuando la voz de alto de Marina haga frenar mi recorrido, luego se agrega ambos lados para decir. El juego despierta la risa, la risa la imaginación y la imaginación las ganas de seguir jugando.
Nos ponemos en ronda con los ojos cerrados y una mano extendida a la espera de recibir una sorpresa, nos entregan un marco de papel. Se nos invita a tocarlo, sentirlo, palparlo, olerlo e imaginarlo. Abrimos nuestros ojos y una voz nos incita a jugar a tomar fotos, con nuestros marcos, capturar imágenes, objetos, sonidos, momentos.
Tímidamente algunos comienzan retratando a su alrededor, pero lentamente el espacio se extiende, ponemos zoom a nuestras miradas y ganamos terreno. Algunos fotografían objetos, gente, ruidos, otros mas aventureros suben escaleras, contorsionan su cuerpo para mirar más allá.
Un marco mucho más grande irrumpe en el juego, nos proponen dejar de lado la mirada individual para hacer un retrato grupal. Cada participante tiene su oportunidad de fotografiar al grupo. Buscamos un lugar, un árbol, un espacio libre, un escalón, los cuerpos se acercan para que todos salgamos en la foto. Las fotos se multiplican para dejar huella del álbum que supimos armar del encuentro.
El Varieté los saluda hasta el próximo encuentro y los invita a participar a todos aquellos que tengan ganas de jugar y compartir un encuentro alegre.