Varieté de los sábados

Presenta: Ante la falta sobre qué filosofar, nos pusimos a jugar.

Protagonistas: Gabriela, Fabio, Adrián, Mónica, Sabrina, Patricia, Aquiles, Flor y Chiara

Varietero Invitado: Los juegos de mesa
Actividad: Haciendo con la contingencia
Lugar de encuentro: La ya bien querida Peña del colorado

Hora: 16hs
Día: 20 de junio de 2009

Tiempo: Crónica de un frío anunciado
Estado: Sorpresivamente divertido

Próxima función: "¿Y qué hago con esto?". Objetos reciclados de tetrapack.


Fragmentos de "Ante la falta sobre qué filosofar, nos pusimos a jugar".


Encuentro signado por la contingencia, los oídos ávidos de filosofar, las bocas dispuestas a proclamar y despertar los engranajes dormidos de tanto mirar se pusieron a jugar. El filósofo no pudo filosofar, el espacio dejó espacio y nos pusimos a jugar por no saber qué hacer. Decisión sabia de los varieteros, ¿qué puede ser mejor que jugar?.



Se produjo el encuentro, esta vez casi inesperado. Como siempre nuestro amigo fiel, el mate, nos acobijó en una ronda, nos dio de su calor, acercándonos en una cofradía alegre.

Los juegos de mesa sobre la mesa anunciando la actividad, esta vez sin presentador, es que ellos hablan por sí solos, viejos conocidos no necesitan presentación (dominó, carrera de mente, cartas). La charla nos llevó por los juegos de la infancia la mesa se hizo potrero, escuela, patio, habitación, esquina, tarde, torta y café con leche.

De repente se hicieron presentes aquellos juegos que perdidos en la memoria pugnaban por ser jugados, así fue que un teléfono descompuesto nos hizo su primer llamado. Las palabras contentas de ser convocadas a exclamar una frase que resistiera al paso del tiempo, se dejaron ser deslizadas de oído a oído.




Por último ya no eran los oídos sostén de decirse, sino que el papel nos permitía inscribir y moldear la poesía que transcurría y mutaba de mano en mano. De este hermoso encuentro fortuito y mágico de palabras y corazones resultaron los siguientes textos.



DECIRES VARIETEROS

El sol quemaba los cuerpos inertes, postrados sobre una tierra azul y húmeda, que olía a moho, las escamas tornasoles escupían al sol estallidos de amarillos y una lengua a lo lejos se relamía los ojos. Era el tiempo del lento estallido, de los labios secos y arenosos: la venganza profunda, densa, lenta que transciende el alma pero también liviana, fugaz, sutil, que así como viene se va, sorprendiéndonos.
Si estuviese contigo ganaría el paraíso, para vivir contigo por siempre sin que nos destierren.
Hasta cuándo? esperaré su decisión,
aunque me congele como un pato en la blanca nieve.


Estábamos por jugar un juego cuando de repente…
Quiero ver tu ojos en las sombras grises como la niebla y hermosos como el cielo nublado, el cielo estrellado y la noche serena nos recuerda aquel beso con gusto a limón. Limón y menta en mi garganta sedienta de ti pero la angina es grave, hasta los músculos tengo como piedras, es como si el tiempo me besara y no existiere mas que ese tiempo real, ese momento eterno y transeúnte. Momentos que determinaron, un final pero también un principio infinito
Por qué?


En la noche oscura la luna nos ilumina,

me gusta el sabor de tus besos y el aroma de tu piel.
Entonces me dan ganas de pensar en nuestro futuro y adónde podemos ir ,
a jugar por las tardes de invierno, las mañanas de otoño y las noches calurosas de verano.
Busco no buscarte. te encuentro. te encuentro enmarañada en la vigilia, en las mañanas, las tardes, las noches. Quién es ? soy yo, al que buscas enmarañada, sin saber que todo el tiempo te tengo entre mis brazos, brazos, antebrazos tentáculos, extremidades, teniéndose, sosteniéndose al ritmo de sus latidos acelerados suspira. Suspira suspira




El Varieté los saluda hasta el próximo encuentro y los invita a participar a todos aquellos que tengan ganas de jugar y compartir un encuentro alegre.